Hay golondrina
que se seca el barro,
debajo de esa cornisa
donde estas anidando.
Encima de ese hogar
que es un calvario,
donde hay un hombre
ala familia maltratando.
Arrinconando a su mujer
a sus hijos condenando,
he tenido que decir hombre
solo por decir algo.
Es peor que un gusano
esos niños angelitos,
que los esta alborotando
con esos gritos.
Cuando están descansando
vienes lanzando berridos,
entras gritando
lo mismo que un perro.
Entras en casa ladrando
y esa pobre mujer,
que te ha querido tanto
ya no te puede querer.
Por que la estas maltratando
un asesino, un verdugo,
un ser repudiado
con cara de bueno.
Hechos de malvado
a quien no respeta,
a su propia familia
no hay que tenerles trato.
Acabaras en prisión
si cometes algún tacho,
pero si te cogemos antes
ni a Dios pidas amparo.
Por que la sociedad
para pasar este trago,
ya esta preparada
para repudiar malvados.
Si tu no la quieres
por favor desaparece,
deja a esa mujer
que otro mejor merece.
Mi amigo Tomás, qué tema tan difícil has tocado.
ResponderEliminar¿sabes? incluso debes lidiar con mujeres que no denuncian por miedo a caer en mayor desamparo (sin trabajo, sin ingresos, con hijos que criar).
He escrito muchas veces sobre ello, tú lo haces, muchos lo hacen. Las leyes reprimen actos así.
Pero pese a todo, sigue ocurriendo. Ahora mismo, alquien atormenta a alguien.
Qué horror.
Recibe un abrazo
Es un regalo leerte hoy, un hombre con todas las letras, denunciando de tú a tú, una actitud cobarde que mancha a todos.
ResponderEliminarUn abrazo
Tomás, un poema que tiene mucho que decir en los tiempos que corren. Un cordial saludo
ResponderEliminarUn placer leer este poema escrito por un hombre....hay tantas clases de maltratos como personas. Sólo es cuestión de buscar los puntos débiles de la pareja.
ResponderEliminarSaludos
Por desgracia es un tema de mucha actualidad... como dicen, la poesia es vida. Tu con estas letras nos traes el lado amargo, esas cosas que no debemos ignorar.
ResponderEliminarMe gusto...
Saludos ;)
Y con tu huida no serás un cobarde.
ResponderEliminarNi habrás perdido la guerra.
Habrás ganado la medalla del honor.
Dejando libre a la mujer merecedora de su propia libertad.
Seca sus lagrimas.
Tapa sus heridas.
Dejala volar...Ella solo quiere amar...
Me quedo con el último cuarteto:
ResponderEliminarSi tu no la quieres
por favor desaparece,
deja a esa mujer
que otro mejor merece.
SALUDOS
De un tema difícil y doloroso has escrito un poema mas que bello.
ResponderEliminarBravo !!! Te saludo, desde el mar, Liliana